¿Has oído hablar de los ritmos circadianos? ¿Sabes cómo nos afectan los cambios de hora y cómo influyen en nuestros relojes biológicos?
Comencemos por el principio, ¿qué son los famosos ritmos circadianos? La palabra viene del latín y significa “alrededor de un día” y nos habla de las distintas variaciones que tenemos en nuestro cuerpo en 24 horas. Estas son controladas por relojes biológicos que generan cambios internos; una parte de nuestro cerebro se encarga de su coordinación y nos permite estar en relación con los cambios medioambientales.
En otras palabras; imaginemos una orquesta sinfónica donde nuestro cerebro actúa como un director de orquesta que capta todos los cambios externos y se lo trasmiten al resto de músicos (que serían nuestros órganos y funciones vitales) y los coordina para poder tocar una melodía armónica en las 24 horas que tiene el día.
Pero estos ritmos biológicos puedes ser afectados por diversas y variadas causas como por ejemplo: factores económicos, trabajar de noche, el jet-lag que se produce por vuelos transmeridianos frecuentes, el stress entre un largo etcétera.
¿Y cómo pueden afectar estos cambios y que implicaciones tienen sobre tu salud? Pues van desde el envejecimiento prematuro hasta diversas patologías como la diabetes, obesidad, depresiones, cáncer y cegueras entre otras.
Está demostrado por ejemplo, que cada 15 años de trabajo rotatorio se produce un envejecimiento de 5 años aproximadamente.
Los científicos han hecho algo muy interesante, han entendido todo estos procesos y lo han aplicado a lo que comemos. Esta ciencia se llama Cronobiología Nutricional, y estudia cómo influyen estos ritmos biológicos en el comportamiento alimentario y como afectan el aprovechamiento de los nutrientes que ingerimos. Es decir saber elegir cual es el mejor alimento dependiendo de qué horario y con qué finalidad para sacarle el mayor beneficio para tu salud.
Actualmente vivimos en una sociedad donde existe una tendencia a comer de una manera muy desordena por muchos motivos. Naturalmente somos seres diurnos, que trabajamos y ejercemos nuestra actividad por el día, dejando las horas de la tarde para los momentos de ocio y descanso, y por último dedicar nuestro ciclo de sueño para la noche y madrugada. Pero nuestra cultura y sociedad nos ha obligado a que rindamos más de lo que estamos preparados, haciendo que modifiquemos nuestros horarios para trabajar por la tarde, por la noche e incluso en la madrugada, lo que produce que poco a poco estemos “modificando” nuestro reloj biológico (a este director de orquesta que hablamos) y produciendo un desgaste muy importante. Por todo esto no nos debería parecer demasiado raro ver personas con trastornos de sueño. Esto trae como consecuencia que se eleve el consumo de hipnóticos y la gente se automedique desde temprana edad con las consecuencias que eso representa.
¿Cuantas veces te has levantado a la mañana con una enorme falta de energía, haciendo un gran esfuerzo para afrontar las primeras horas del día tomando uno o varios cafés o complejos vitamínicos para ayudar a tu cuerpo a ponerse en marcha?
¿Cuántas veces a la tarde tienes ganas de comer algo dulce de una forma compulsiva pero sin apetito?
Pues varios estudios científicos demuestran que estos comportamientos son debido a carencias o trastornos de algo que se llama NEUROMEDIADORES, que son sustancia químicas que regulan nuestra conducta alimentaria. De ahí la importancia de escoger adecuadamente los alimentos para aprovechar los nutrientes, respetar las horas de sueños, hacer deporte, evitar el stress y por ende mejorar nuestra calidad de vida.
Te pongo algunos ejemplos prácticos de todo esto que hablamos para que te quede más claro. En la primera mitad del día de necesitamos de energía para que estemos con fuerzas y ánimos para rendir las horas que siguen, para ello es excelente aportar algo que se llama TIROSINA. ¿Y cuáles son los alimentos que tienen Tirosina? Huevos, carnes, vegetales, legumbres, acelga, arroz integral, cereales integrales, manzanas, espárragos, aguacates, zanahorias, espinacas, soja, sandia, pepino, perejil, berros, y almendras.
Sin embargo en la segunda mitad del día necesitamos todo lo contario pues nuestro organismo nos pide almacenar, reparar y regenerar los tejidos y células. Para esto lo mejor es algo que se llama TRIPTÓFANO que nos permitirá estar más relajados en la tarde, controlar la ansiedad, el deseo de picoteo constante y nos ayudará a dormir mejor. ¿Cuáles son los alimentos ricos en Triptófano? Estos son algunos: carnes blancas, crustáceos, mariscos, frutos secos entre otros.
En resumen te propongo que por la mañana aportes TIROSINA. A partir del mediodía, tarde y noche aportes TRIPTÓFANO. De esta manera ayudarás a tu organismo a vivir de una manera más natural y podrá aprovechar mejor los alimentos en tu beneficio. ¿Qué lograrás? Verás que te sentirás menos cansado y tendrás más energía para pasar el día. Eliminarás la ansiedad de la tarde y sentirás un mejor estado de ánimo y un mejor bienestar tanto psíquico como físico. Vale la pena, ¿no?
¿Qué tal si lo pruebas y me comentas como te ha ido? Verás los cambios tú mismo y ganarás en calidad de vida.
Un saludo y nos vemos en el próximo post!!!
Acuerdate que si quieres que tratemos algún tema en particular, solo tienes que decirmelo y hablaremos al respecto.